Y mientras tanto en México
- marioalvarad
- 7 jun 2022
- 2 Min. de lectura
Han pasado ya varios días...semanas...meses...desde nuestra última actualización y lo que se esperaba que fuera solamente un tiempo de descanso y vacaciones familiares durante un mes, mas un poco de tiempo extra en nuestro país se ha convertido en 6 meses de readaptación y aprendizaje.
Hemos aprendido que la vida misionera da muchísimas vueltas y que la expresión "Bienaventurados los flexibles" que oímos durante nuestros tiempos de capacitación pueden cobrar un nuevo sentido en el ministerio que Dios nos ha puesto.
Durante estos meses hemos continuado con nuestro servicio activo en nuestros ministerios en Haití, pero, hemos estado aprendiendo a hacerlo de manera remota con las herramientas tecnológicas que gracias a nuestro buen Dios poseemos hasta ahora. Ha sido un gran viaje seguir aprendiendo de nuestros ministerios, de la cultura e incluso del idioma estando tan lejos de casa, sin embargo, hemos visto como el Señor nos ha ayudado en cada momento de necesidad.
Además de esto, damos gracias al Señor, ya que, una de las principales razones para venir a México era poder participar del culto de ordenación de Mario en Tapachula. Pero que travesía poder llegar a esto.
El plan original era participar de dicho culto el día 15 de Enero, sin embargo, por motivos de salud relacionados con nuestro Superintendente General en Jurisdicción, Dr. Gustavo Crocker, no pudo ser de esa manera, y tuvimos que esperar en Dios poder estar en la fecha de reprogramación el dia 26 de Marzo.
Por motivos de seguridad y logística, nos fue imposible regresar a Haití durante los siguientes meses, lo que nos permitió poder participar de dicho culto, y ahora, damos gracias a Dios por la oportunidad brindada a Mario de poder ser ya un Presbitero de nuestra Iglesia.
Y después de esto...que sigue?
Bueno....hay que averiguarlo.
Bendiciones y gracias por sus oraciones.
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